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En América Latina hay muchos lugares de enorme interés para ver y disfrutar. Mucha gente los conoce y otra hace planes para conocerlos en el futuro. Estamos hablando de las Cataratas de Iguazú, del Glaciar Perito Moreno, de la ciudad de Buenos Aires en Argentina; de las Torres del Paine, de Atacama y de la Isla de Pascua en Chile; del Salar de Uyuni en Bolivia; de Río de Janeiro en Brasil; de las islas Galápagos en Ecuador; de Cartagena de Indias en Colombia; del Salto de Ángel en Venezuela; de Cusco y Machu Picchu en Perú; de los Parques nacionales en Costa Rica; de los templos precolombinos en México como Teotihuacán, Palenque, Uxmal y tantos otros, así como de los paisajes, lagos, volcanes y antiguos templos mayas en Guatemala.
Esas referencias fetiches suelen ser la principal motivación de un viaje pero, en torno a ellas, los viajeros acaban viendo muchas más cosas en cada país que son también de notable interés.
En esta sección no vamos a poner de relieve el encanto -ya conocido- de aquellos destinos estrella ni de los más comunes que los acompañan. En cambio, vamos a sugerir ciertas PROPUESTAS SINGULARES de corta duración (de 1 hora hasta 4 días) cuyo atractivo resulta especial, distinto o peculiar. Podrán gustar mucho o, en algunos casos, no tanto. De todos modos su lectura merece la pena: Quizá resulte interesante incorporarla al viaje contratado.
Argentina
La zona de la Península Valdés es conocida mayormente por la presencia de las ballenas franca austral o ballenas del sur que cada año vienen, en los meses de junio a diciembre, para el nacimiento de las crías y el apareamiento. También es conocida por la pingüinera de Punta Tombo, la más grande del mundo de pingüinos magallanes, al sur de Trelew. Pero aparte de estos animales “estrella”, también existen varias colonias de lobos marinos en los alrededores de la Península Valdés. Seguramente todos hemos visto alguna vez en nuestra vida un lobo marino en el zoológico o en un parque marino, por lo que teniendo ballenas y pingüinos muy cercanos, el lobo marino pasa un poco desapercibido.
Brasil
Bolivia
Colombia
En la sierra nevada de Santa Marta situada sobre el Caribe colombiano fue descubierta hace unos 40 años la mítica Ciudad Perdida de los indígenas Tayrona datada en torno al siglo XI. Poca gente la conoce ya que para llegar allí hay que hacer una caminata de tres días a la ida y dos a la vuelta que requiere estar en forma. El trek es exigente no tanto por la altura que se alcanza, que no es significativa, sino por desarrollarse en una atmósfera tropical, muy húmeda, lluviosa, con barro, vadeando varios ríos pequeños y un tanto rompe piernas subiendo y bajando. La ciudad está situada a unos 1.200 metros de altura, accediendo a ella por una escalinata con 2.000 peldaños.
Ecuador
Ecuador es un paraíso para los amantes de la naturaleza. En este itinerario podrás disfrutar de la amplia variedad de hábitats naturales que ofrecen las condiciones ideales para la más alta diversidad de especies de aves, perfecto para su observación, así como de las especies y muestras de los más bellos y raros árboles, plantas y flores.
México
La más conocida de todas las mariposas de América del Norte, la mariposa monarca, puede recorrer, gracias a su gran resistencia física, más de 4.000 kilómetros desde Canadá hasta los bosques de oyamelen México. Su migración anual es uno de los grandes espectáculos naturales del altiplano mexicano.
Chile
El Crucero Australis es uno de los productos más destacables en la Patagonia argentina y chilena, que conecta ambos países en un viaje inolvidable a través de los fiordos, el Estrecho de Magallanes, el Canal de Beagle y la Avenida de los Glaciares. La empresa opera varios barcos y existen diferentes rutas, pero las más conocidas son las que unen Punta Arenas en Chile y Ushuaia en Argentina (y viceversa). Los viajes son de entre 4 y 5 días y siempre pasan por el mítico Cabo de Hornos en estas rutas. Es un crucero de exploración, por lo que casi todos los días existen excursiones a tierra firme, llegando con pequeños barcos zodiac para conocer la flora y la fauna con charlas informativas.
Perú
El recorrido se inicia en la localidad de Qorihuayrachina, a la altura del kilómetro 88 de la vía férrea Cusco-Quillabamba y toma entre tres y cuatro días de ardua caminata. Durante la ruta, que atraviesa una impresionante variedad altitudinal -con climas y ecosistemas tan diferentes como la puna altoandina y los bosques de neblina- se deben superar dos pasos a gran altura (el mayor de ellos, Warmiwañuska, a 4.200 msnm) para concluir finalmente con un mágico ingreso a Machu Picchu a través del Inti Punku o Puerta del Sol.
¡Estas propuestas singulares no se venden sueltas sino dentro de un programa de viaje más extenso!
Vivencia Andina – Especialistas en viajes a Sudamérica, Centroamérica y México.
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